El parto en el agua ha demostrado ser una experiencia mucho más satisfactoria para la mujer que el parto convencional. Alivia el dolor durante las contracciones y le permite mantener un mayor control de su cuerpo. El agua facilita la movilidad para adoptar la postura que más cómoda le resulte en cada fase del parto. 

A pesar de toda la evidencia que existe sobre los beneficios del parto en el agua, todavía existen algunos prejuicios e ideas equivocadas sobre esta opción de parto natural.

El parto en el agua no es algo nuevo, no es una moda ni mucho menos una excentricidad. Se trata de una alternativa dentro del parto natural respetado o parto humanizado. 

Está demostrado que una menor medicalización de la mujer tiene mayores beneficios para su atención y su resolución del parto. Y una de las mejores formas de manejar el dolor sin el uso de fármacos es la hidroterapia. 

El nacimiento en el agua no es el objetivo en sí mismo de la hidroterapia, sino conseguir aliviar el dolor de manera natural y obtener los beneficios que ofrece el agua durante el trabajo del parto.

Los beneficios del parto natural en el agua o de utilizar la bañera con agua templada durante las contracciones están respaldados por las instituciones sanitarias, tanto a nivel nacional como internacional. 

Sin embargo, en España todavía existen ciertos prejuicios hacia esta alternativa de parto natural tan normalizada en otros países como Australia, Canadá o los países nórdicos. En muchos casos esta oposición se encuentra incluso dentro de algunos colectivos sanitarios por falta de formación profesional al respecto. 

Siguiendo la misma línea de los mitos y realidades del parto natural respetado, vamos a desmontar algunos de los falsos argumentos más frecuentes en contra del parto en el agua. 

El parto en el agua conlleva un mayor riesgo de infección o de riesgos para el bebé que un parto convencional

El parto en el agua no está asociado a efectos adversos para el bebé ni para la madre, por tanto no conlleva un riesgo mayor de infección para el bebé que el parto convencional. 

Por el contrario, el bebé se encuentra mejor alineado con el canal del parto, ayudando a evitar fórceps, cesáreas y episiotomías. 

El nacimiento supone una transición más suave, el bebé sufre menos y está más oxigenado.

El agua fomenta la relajación y la dilatación acortando el tiempo de parto, lo que resulta muy positivo para el bebé. También aumenta la posibilidad de parto vaginal, con los beneficios que esto conlleva tanto para la madre como para el hijo.

En este artículo científico puedes obtener más información sobre los nacimientos en el agua.

Al no poder utilizar la analgesia epidural el parto resulta mucho más doloroso para la madre

Como hemos comentado en otros artículos, la analgesia epidural es un método eficaz contra el dolor de las contracciones, pero también es un método invasivo que interfiere en el parto. Por eso es importante que conozcas los posibles efectos secundarios que conlleva la epidural. Igualmente importante es que conozcas las ventajas del parto natural sin epidural. 

Sin embargo, el agua favorece la relajación al reducir la producción de adrenalina y alivia el dolor durante las contracciones de forma natural. Además, el agua caliente facilita y acelera la dilatación. 

Durante el parto en el agua aumenta la generación de endorfinas, una sustancia que produce un efecto analgésico natural que relaja a la mujer y le ayuda a sobrellevar el dolor. También se produce un aumento de secreción de oxitocina, una hormona que favorece las contracciones. Esta hormona ayuda posteriormente a la lactancia y resulta esencial para establecer el vínculo con nuestro bebé.

Por eso los países en los que se practica el parto en el agua de forma normalizada cuentan con unas tasas de uso de la epidural muy por debajo de las de España.

No en vano, sumergirse en agua caliente o templada forma parte de los métodos naturales para disminuir el dolor de las contracciones recomendados por el Ministerio de Sanidad y otras autoridades sanitarias como la OMS.

No se puede garantizar la seguridad de la madre ni del bebé si surge alguna complicación

Si el parto en el agua se realiza bajo supervisión médica especializada en un hospital lo primero que se tiene en cuenta es la seguridad de la madre y su hijo. Esto garantiza la rápida respuesta ante cualquier problema que pueda surgir durante el parto.

Por ejemplo, en One to One trabajamos en las instalaciones de la Unidad de Parto Natural del Hospital HM Nuevo Belén, ofreciendo toda la seguridad para la mujer y su bebé. El hospital cuenta con todos los servicios si fueran necesarios: Urgencias, quirófano, sala de reanimación, UCI neonatal y de adultos. 

El momento del expulsivo puede ser muy peligroso para el recién nacido

Como hemos comentado, el nacimiento supone una transición más suave y el bebé sufre menos. 

El bebé sale de la bolsa de agua a un medio líquido igual que en el que estaba, no existe peligro de ahogo. Se trata de un proceso de transición al mundo exterior más lento y menos agresivo. 

Por eso el momento del expulsivo resulta más suave, el bebé sale primero al agua caliente y va después a los brazos de su madre a respirar y quedarse con ella piel con piel.

En definitiva, el bebé sufre menos porque la madre tiene menos dolor y el parto es más corto. Además, al encontrarse mejor alineado con el canal del parto, ayuda a evitar el uso de instrumental o intervención. 

No obstante, la madre elige si quiere tener su parto en el agua o utilizar este medio para paliar el dolor de las contracciones y dar a luz fuera. La decisión siempre es de la mujer.

Tu parto en el agua en Madrid.

Nuestra Unidad de Parto Natural tiene a su disposición los servicios del Hospital HM Nuevo Belén para tu mayor tranquilidad y brindarte toda la seguridad para ti y tu bebé. El hospital cuenta con todos los servicios si fueran necesarios: Urgencias, quirófano, sala de reanimación, UCI neonatal y de adultos.

Si lo deseas, tienes la posibilidad de hacer un Tour guiado para conocer las instalaciones de la Unidad de Parto Natural del Hospital HM Nuevo Belén.